domingo, 25 de mayo de 2014

La zona del silencio 2

Lunes por la mañana

El sol salio por la mañana, Humbert sintio el calido abrazo de su esposa;
-mi amor, ¿no vas a tomar tu vuelo?-
Humbert abrio los ojos vio la hora en su celular y cerro los ojos, suspiro hondo, tranquilo, volvio a ver la hora y vio que eran ya tarde para el vuelo, nadia jamas vio a un hombre saltar tan alto de una cama como lo hizo Humbert esa mañana, su esposa todavia con mucho sueño preparo cafe y jugo de naranja, tenia tanto sueño que creia haber hecho el cafe en la exprimidora de jugos y jugo en la cafetera, Humbert comio un par de tostadas de pan con mermeladas, beso a sus hijos y se marcho en el carro, seguramente su esposa recogeria su carro en el estacionamiento publico del aeropuerto, aunque ella tenia el suyo propio, condujo lo mas rapido que pudo para llegar al aeropuerto, todo parecia tan surrealista, el dia mas importante de su carrera se dormia, el celular tenia la alarma prendida pensaba, pero se dedico a conducir hasta el estacionamiento, un par de empleados barria con tranquilidad el estacionamiento, corrio hasta llegar a la entrada, vio los mostradores de la aerolinea Flyus solos, llevaba solo una maleta, por lo que seria rapido se dijo, llego frente a los mostradores;
-señorita, vengo por el vuelo con destino a Chihuahua-
la señorita sonrio;
-salio hace una hora, señor-
Humbert agacho la cabeza, la golpeo con el mostrador tan suave que no hizo ruido;
-pero sale otro vuelo con destino a Chiuhuahua en media hora, le cambiare su boleto por solo un 15% -
Humbert asintio, saco su targeta de credito y pago, esta ves fue directo a la sala de espera, paso por Happys Coffees donde compro un cafe capuchino y un pan, se sento y vio mucha gente de origen mexicano arribando a la sala, un hombre de piel blanca y ojos azules se sento frente a el, parecia americano, salvo por el cinto, la camisa y las botas, un joven se le acerco, era moreno ambos platicaron en español, vaya que le gustaba el español, pero era tan dificil, se decia, se acomodo en la banca, el hombre abrio su periodico y leyo, Humbert vio la contraportada del periodico leyo con un poco de dificultad el encabesado;
Desaparecidos en la zona del silencio”
en la fotografia se observaban varias camionetas abandonadas en la carretera, Humbert siempre se elogio asi mismo por su aguda vista, leyo con cuidado algunas frases de la nota;
militares encuentran camionetas abandonadas, ocupantes desaparecidos, armas de fuego en los vehiculos, desaparecieron sin dejar rastro, armas de fugo de alto calibre se encontraron afuera de las camionetas, no fueron disparadas....”
-atencion pasageros del vuelo 543 de flyus pasen abordar a la puerta 5-
dijo una voz automata, todos los pasageros se pararon y fueron a la puerta, Humbert penso por momento en dejar todo, regresar a casa y olvidarse de todo, pero cuando quizo correr y gritar el nombre de su esposa, la señorita de la aerolinea rompio el pase de abordar y le dejo pasar, subio y tomo su asiento, permanecio pensativo todo el viaje, por primera ves se pregunto a donde diablos se dirigia.



Bienvenido a Mexico

Humbert descubrio dos cosas al pisar territorio mexicano, que los tramites de migracion eran tan engorrosos como en los Estados Unidos y que le estaban esperando en el centro de Chihuahua los demas cientificos, mientras esperaba un agente de migracion se le acerco, le pidio seguirlo y lo saco de la fila, Humbert escucho un par de murmullos enojados, el agente le señalo la oficina de migracion y le invito a salir, la gente dejo la envidia para en ver con curiosidad aquello, alguien murmuro que llevaba drogas, otro armas, uno mas que seria deportado, pero la verdad es que fue llevado a una sala donde permanecian dos agentes migratorios revisaron su documentacion una y otra ves;
-¿pasa algo?-
pregunto Humbert, una puerta se abrio, un hombre de gabardina negra le observaba mientras fumaba;
-sellen el pasaport y retirense-
ordeno el hombre, los agentes sellaron el pasaporte y se marcharon, el hombre tenia pelo largo y barba, se sento y observo a Humbert Sterling como si leyese su pensamiento;
-¿quien es usted?-
pregunto Humbert;
-las preguntas las hago yo, ¿de acuerdo?-
dijo el hombre, Humbert retrocedio a su silla, ese era su unico refugio se dijo;
-¿tiene miedo señor Sterling?-
Humbert noto que el hombre estaba armado;
-no-
el hombre rio;
-tiene miedo, lo se, lo veo en sus ojos, podria olerlo en el ambiente desde la entrada, pero vino aqui, valiente, lleno de preguntas, pero solo una de ellas es valida, una de ellas es real y da respuesta a todas-
Humbert vio al hombre;
-¿por que?-
el hombre asintio;
-lo capta rapido, eso es bueno, ayuda a saber quien esta conectado con la realidad, llega aqui usted lleno de preguntas en busca de las respuestas, pero no las hay, nunca las hubo, ni las habra, a usted no le enviaron para saber el por que, si no para saber el que sucedera con usted, usted evadio y nego a dar respuesta a nuestras advertencias, ahora debera sufrir las consecuencias de sus actos-
el hombre se paro, apago el cigarro y salio de alli, los agentes de migracion lo llevaron hasta la aduana donde les perdio de vista, afuera tomo un taxi, donde pidio que lo llevaran al centro, Gabriel Byrne le esperaba en un restaurante famoso de la ciudad, hubo risas, platica y un par de cervesas amenisan todo, alli habia por lo menos 20 personas, entre cientificos, estudiantes universitarios y agentes de la NASA, Humbert sonrie, se niega a pensar que algo podria salir mal, decide ignorar todo lo demas, pero escucha en su cabeza las palabras de ese hombre, horas mas tarde llegan a la famosa zona, es un desierto arido, solitario y sin nada de vida visible, pero deberia de haber, se dice Humbert, mientras los universitarios preparan los equipos y las tiendas de acampar, Byrne bebe unas cervezas, Humbert cree que ya bebio demas pero le sigue el juego, salen a caminar, caminan y ven el desierto;
-cuando muera todo esto sera tuyo-
dijo Byrne en español perfecto, Humbert rio a carcajadas;
-espero que veamos un poco de vida por aqui, por que esto empieza aponerme los pelos de punta-
dijo Humbert;
-mira, un burro, traeme mi sombrero y lo montamos-
Humbert rio, vio al burro que caminaba tambaleandose, el animal cayo en sus patas, lanzo un desgarrador sonido y cayo al suelo, donde no se movio mas, Byrne que siempre habia sido un algido defensor de los animales y un protestante de la cultura vegetariana corrio con su botella de agua, inutilmente trato de darle agua al pobre animal, el cual no reacciono, Humbert vio a su alrededor;
-Gabriel-

dijo Humbert, aunque creyo haber gritado, no habia sido mas que un susurro, Gabriel Byrne se acerco y vio lo que le enseñaba Humbert, a su alrededor permanecian cientos, quiza miles de cadaveres de animales, vacas, chivos, burros todos ellos pudriendose bajo un sol abrazador, ambosal ver aquella imagen sintieron escalofrios y un largo silencio....

No hay comentarios:

Publicar un comentario