sábado, 9 de febrero de 2019

Año 1999


Año 1999

En el año 1999 se produjo el desastre conocido como la gran tragedia, un virus de computadora se apodero de todos los sistemas computacionales de la tierra, provocando la explosión de todas las cabezas nucleares y plantas de energía nuclear en el mundo, desde entonces el mundo tal y como lo conocíamos colapso, no se sabe nada de otros países, no sabemos nada, nuestro mundo se basa en la supervivencia, con la radiación y las nubes nucleares vinieron las mutaciones de todo los seres vivos de la tierra,  la contaminación del ecosistema mato a millones de personas en los Estados Unidos de América, ahora, los que sobrevivimos, estamos enfrascados en una guerra constante por los recursos, hace veinte años de la gran tragedia y todos seguimos en las mismas, matando, violando y destruyendo para sobrevivir siempre evitando lo más que se pueda la muerte…

Patrick Jhonson abrió los ojos, la luz del cielo gris le molesto, se sentó y pudo observar a su alrededor, su casa, su refugio estaba destruido, aquella casa rodante y todos sus bienes destruidos, lo habían dejado vivo, aquello debía ser un mensaje, ¿Para quién?, no importaba, se paró como pudo y camino dando pasos pequeños y lentos, camino, no supo cuánto, pero camino, quería alejarse lo más posible, de sí mismo, su hogar, pero principalmente de los saqueadores, camino mucho, no supo cuánto, pero camino sin rumbo, no traía brújula, no veía caminos, solo camino, camino mucho, hasta llegar a un paraje solitario, no vio nada más que la nada, solo podía pensar que necesitaba encontrar resguardo antes que llegara la noche, en la noche saldrían las bestias nocturnas a cazar, sin sus armas y sin resguardo, era presa fácil, mientras avanzaba vio un ciervo, este le observo y ambos se vieron uno al otro, era un macho, grande y fuerte, las dos cabezas le veían detenidamente, a Patrick se le  antojo que el ciervo le matara con su enorme ornamenta, seria rápido supuso, el ruido de un  disparo resonó a la distancia, el ciervo cayó herido, Patrick  observo a su alrededor, un hombre y un niño salieron de unos matorrales;
-¡no hagas nada estúpido!
Ordeno el hombre de unos cincuenta años, el niño llevaba el rifle que había matado al ciervo, el anciano un revolver, Patrick alzo las manos y les sonrió;
-¿con quién estas?
Cuestiono el hombre;
 -con nadie.
Contesto Patrick;
-¿eres de los saqueadores?
Patrick le miro;
-no, unos saqueadores atacaron mi hogar.
Patrick observo al hombre, el cual le registro de pies a cabeza;
-ya, puedo desmayarme.
Dijo Patrick que se dejó caer al suelo y perdiendo conocimiento.

Patrick abrió los ojos, estaba en una cama, dentro de una cabaña, era observado por el cazador que llevaba una escopeta;
-no hagas nada estúpido.
Patrick suspiro y se recostó de nuevo;
-¿Cuál es tu nombre?
Patrick le observo;
-Patrick Jhonson, solía vivir en la cañada de los muertos.
El hombre le observo;
-ese lugar está plagado de zombis.
Patrick le observo;
-yo los llamo calcinados.
Una mujer se asomó de la puerta;
-aquí está la cena.
Dijo una mujer que les traía platos;
-espero que este nuevo amigo tuyo no se quede.
Patrick sonrió;
-me iré en cuanto pueda señora.
Dijo Patrick y vio marcharse a la mujer y ambos comieron frijoles, aquellos eran los mejores frijoles que había probado en su vida;
-me llamo David Swann, estas en mi humilde morada, con mi familia, así que si prometes ser bueno con mi familia no me veré en la necesidad de volarte los sesos.
Patrick asintió, dos niños entraron a la habitación, el mayor era el que había llevado el rife de caza, la otra era una niña de tan solo ocho años, llevaba un osito de peluche;
-Jhon, Lisa este es Patrick un amigo que se quedara solo unos días.
Ambos saludaron;
-te dije que era el hombre más feo que habrías visto.
Dijo Jhon, las luces fueron apagadas, la esposa de David entro asustada;
-los zombis allí vienen.
Advirtió la mujer, rápidamente apagaron las luces, todos guardaron silencio, tras las paredes se empezaron a escuchar arañazos, Lisa abrazo a su padre, en la puerta se arremolinaban los zombis gruñendo y rugiendo, Patrick se paró;
-¡quédate quieto con un demonio!
Le ordeno David, Patrick se paró y corrió contra la puerta y la golpeo, empezó a rugir de una manera gutural y asquerosa, David apunto con la escopeta, los seres de afuera rugieron y golpearon la puerta y lentamente se marcharon rugiendo, David observo a su esposa con sorpresa, esta le hizo bajar la escopeta, Patrick se sentó en una silla del comedor, David se paró, llevo a su esposa e hijos a su cuarto a dormir, después fue con Patrick y se sentó a su lado sirviendo algo parecido al café, una infusión negra, el olor era horrible, pero el sabor era muy bueno;
-¿Cómo hiciste eso?
Le cuestiono David, Patrick sonrió;
-mi hermano, él y yo solíamos vivir solos allí en la cañada de los muertos, éramos normales, pero el, en sus investigaciones sobre la radiación se volvió uno de ellos, al verlo me dio tanto miedo, tenía unos doce años, el me vio, dentro de él aún estaba su alma, cerro el puño y vivió entre ellos, poco a poco perdió todo rastro de su memoria, no hablaba, pero siempre volvía y me cuidaba, parecía que nunca dormía o a menos no dejaba que yo lo viera dormir, quizá tenía miedo que lo matara, pero por las noches siempre me cuidaba, se sentaba en la silla del comedor y me observaba, siempre tarareaba una canción, creo que era una de Jhony Cash.
Ambos sonrieron;
-tengo sueño, mañana vamos a tu campamento en la camioneta, por ahora voy a dormir un poco.
Patrick le sonrió y se quedó en la oscuridad y la soledad del comedor.

La mañana siguiente amaneció a la hora de siempre, el amanecer un gris amanecer, como siempre los días eran grises, la gente decía que nunca se retirarían las nubes de polvo y radiación, Patrick abrió los ojos, Jhon le observaba sentado apuntándole con un revolver;
-¡baja esa estúpida arma!
Le ordeno su madre, Jhon obedeció de mala gana;
-¿Por qué tiene que quedarse este indigente?
Patrick solo escuchaba;
-este indigente nos salvó la vida anoche, cállate el maldito hocico.
La madre de un golpe desarmo al chico y este se fue furioso a su cuarto;
-disculpa, está en la edad.
Patrick asintió;
-no lo culpo, son días difíciles, él lo sabe.
La mujer preparo el desayuno, mas frijoles con carne de venado frita, era el olor tan delicioso, pero no lo fue tanto como la carne, Patrick comió cada pedazo de carne, los huesos los chupaba hasta quitarles toda la carne, todos en la mesa le observaban, pero este les ignoro por completo;
-los zombis por suerte se comieron los deshechos del ciervo, festejo David.
Patrick dejo de comer;
-no los tires, guárdalos.
David le observo;
-¿Qué?
Cuestiono David;
-los deshechos, puedes utilizarlos para atraer un par de esos zombis y tenerlos como perros, así los demás calcinados se mantendrán alejados.
Aquello hizo a toda la familia hacer muecas de asco y terror;
-lo de ayer lo vi con unos calcinados que mi hermano llevo, los teníamos como perros, los calcinados pueden aprender, al final de cuentas son territoriales y convenencieros, buscan lugares cómodos para dormir, como los perros.
Aquello no gusto a nadie, tras comer, Patrick y David subieron algunas armas y algo de provisiones de agua y comida a la vieja camioneta, Lisa llevo un galón de combustible, Patrick se despidió de su familia y ambos marcharon en el viejo camino, tras llegar a la cañada de los muertos, Patrick daba instrucciones;
-¿Dónde están los zombis?
Patrick sonrió;
-en esta cañada lo último que debe preocuparte son los zombis.
Dijo Patrick, esto sorprendió a David;
-allí.
Señalo Patrick, David vio la casa rodante, había estado en llamas, tras detener la camioneta ambos bajaron con las armas listas, Patrick observo todo su equipo y material destruido, tras abrir la puerta de la casa rodante una sombra corrió hacia él y se arrojó, Patrick disparo y mato a un zombi con el revólver, adentro David y Patrick vieron a un par de cadáveres de zombis, Patrick se agacho a verlos;
-¿tu hermano?
Patrick les observo;
-son Edward y Thomm, eran los que teníamos como mascotas, mi hermano aquí no está.
Patrick salió de la casa rodante;
-ayúdame, hay que sacar mi equipo.
David fue con él, no muy lejos, dentro de un carro descubrió los asientos, debajo de los asientos saco una caja, la abrió y David vio con sorpresa lo que allí escondía Patrick, allí había armas, una máscara de gas, un casco, equipo de protección para el cuerpo, un chaleco blindado, juntos subieron todo a la camioneta;
-¿Qué piensas hacer con todo eso?
Patrick sonrió y contesto;
-tomar venganza.
David suspiro y sin más condujeron de regreso a casa.