miércoles, 26 de septiembre de 2018

Caballero Dragon Prologo


Lucia sintió el frio de la hoja negra atravesarle, se giró y observo a su atacante:

—Voldemort­

Este sonrió:

—lo siento, es solo que sentí, que no debía hacerlo.

Lucia la poderosa guerrera de la Iglesia Única observo a su atacante:

—no puedo permitirte atacar a los Garlock.

Los otros miembros del grupo le vieron furiosos:

— ¡maldito traidor!

Grito Antonio Fayret:

— ¿traidor yo?, no sabes lo que significa esa palabra:

Voldemort camino frente a ellos, eran tan jóvenes, tan llenos de vida, tan idiotas:

—Lucia de Voltein, Caballero Templario de alto rango, te sentencio a muerte por el asesinato de la Señora Wendolyn Destroch-.

Lucia enfureció, la espada no le había atravesado ningún órgano vital;

—eres un desgraciado mercenario.

Voldemort sonrió y rio de aquello:

—no, soy un caballero negro, te lo dije desde el principio que te conocí, no tengo bandos, no tengo aliados, yo soy mi propio bando.
Antonio Fayret saco de su espalda el arco de guerra, lanzo una flecha contra Voldemort, pero la flecha se desvió;

— ¿cómo has hecho eso?

El caballero negro sonrió:

—Calenté el aire alrededor mío, es algo de ciencia o alquimia básico, lo sabrías si hubieses estudiado niñato.

Lucia de Voltein observo a Voldemort:

— ¡dime quien eres realmente!

El joven de pelo negro, ojos cafés y piel blanca la observo:

—soy Veltrich Destroch, hijo de Wendolyn Destroch, nieto del rey Vlad Destroch-

Lucia de Voltein no podía creerlo:

—mi madre murió bajo tu espada, mi hermana mayor fui violada por tus hombres, a veces debo confesar sueño con ella y sus gritos de dolor, me levanto como loco de la cama, pero aun así, nada se compara a lo que hiciste con el bebe, mi hermanito menor, lo arrojaste por el precipicio de la fortaleza de la Desolación, si hay un infierno, espero que ardas en el por siempre.

Dijo Veltrich con una sonrisa y ojos llorosos:

—seguía órdenes, un caballero no desobedece sus órdenes.

Dijo Lucia de Voltein:

—tampoco un rey traiciona a su pueblo, por cierto, olvida lo que te dije del infierno, porque arderás hoy.

Veltrich con ambas manos tomo la espada, Lucia de Voltein vio sus ojos llenos de rabia, recordó a un niño con una espada y ella le clavaba un puñal en el corazón, había fallado, por eso se había desembocado todo eso, Veltrich giro la espada, Lucia gimió de dolor, pero el filo de la espada empezó a arder en llamas, las cuales avanzaron hacia adelante, la espada se llenó runas:

—la espada de Daemus.

Veltrich sonrió y Lucia Voltein ardió en llamas, ella empezó a lanzar gritos de dolor, Veltrich la pateo y la arrojo desde el precipicio cubierta en llamas, el demás grupo de Elegidos de la capilla le vieron furiosos, los Garlock, el enorme clan de orcos rugieron y marcharon por la cordillera, era demasiado tarde, no podrían detenerlos, amenazaban sus líneas de abastecimiento y control desde el Valle del Rey, Veltrich se despidió de sus amigos saltando al vació, pero lo vieron alzarse sobre el cuerpo de un dragón rojo Sangrefuego, en ese momento, toda esperanza se perdió...