Real del oro 5

Dentro de ella solo hay dudas y miedos, el cree tener la verdad absoluta, ambos están equivocados, y ambos están en lo correcto...

Ella se abre paso en la caverna misteriosa, la cual abre sus fauces, con la linterna se alumbra con cuidado, el screamer ha quedado atrás, pero se detiene, piensa un momento, ¿como sabe que se llaman screamers?, esto significa gritadores, Carmen tembló de miedo, ¿como sabia eso?, entonces ella empezó a recordar algo, algo que había olvido, es como saber que perdiste las llaves, pero esas llaves las usaras para abrir puertas que durante toda tu existencia estuvieron cerradas, donde creíste que lo mas profundo de ti no debía salir, mientras camina ve una puerta metálica, un letrero con luz muestra como una salida, pero dice la leyenda;

No escape

Carmen abre la puerta, hay un corredor oscuro que lleva a un lugar donde cierta luz entra, ella se acerca a este lugar, con temor, mientras da luz buscando algo;

-los llaman screamers-

dijo la voz de un niño, carmen vio al niño atraves de una rendija de una puerta de closeth, era el;

-son seres escalofriantes que deambulan locos, ciegos y torpes, no oyen, no escuchan, pero ellos pueden encontrarte solo con el tacto, gritan furiosos por las madrigueras del infierno, donde lo que entra, no puede salir-

los niños lo escuchaban atentos, entre ellos carmen vio a una niña de vestido rosa y un moño en la cabeza, era ella misma, entonces una puerta se cerro, los niños se voltearon y a Carmen se le callo la lampara, los niños se asustaron, Carmen recogió la lampara, el niño que ella recordaba que fue su amado se acerco valientemente, los niños lo siguieron atentos, Carmen retrocedió, tropezó con algo, Carmen se giro y noto que atrás de ella no había mas camino, era un armario;

-ten cuidado-

el niño contesto a su amiga;

-no tengo miedo-

Carmen escucho la puerta abrirse, esta se abrió lentamente, Carmen noto que afuera no había nadie;

-¿que esta sucediendo?-

se pregunto, mientras en las ventanas de esa casa espesaba a llover...

Daniel había corrido tan lejos que no sabia donde estaba, pero al parecer había llegado a una iglesia;

-hola-

dijo mientras el eco se perdía;

-¡hola!-

grito con todas sus fuerzas;

-¡hola!-

desde algún lugar se escucharon pasos de gente, de una escalera se asomo un hombre con una antorcha;

-¡un hombre ha llegado!-

grito el hombre, este corrió con una antorcha, otros hombres corrieron con el;

-¡agáchese!-

le gritaron, Daniel se giro y vio tras de el a uno de esos seres el cual lanzo un chillido horrible, los hombres sacaron armas de fuego y dispararon contra el ser abominable que parecía una capa extendida, pero con ojos rojos llameantes, los disparos de los hombres cayeron sobre ese ser maldito, este grito furioso, los tímpanos de Daniel se colapsaron y empezó a sangrar, dentro de su cabeza sintió un terrible dolor y se desmayo, perdiendo su conciencia....